jueves, 17 de marzo de 2011

Inquietudes arqueológicas (2)

Completamos el reportaje "Inquietudes arqueológicas" con algunas preguntas sobre los vestigios aparecidos en el solar de del Museo de Colecciones Reales, el paradero de las Puentes Toledana y Segoviana y las piezas históricas que se han perdido durante la reconstrucción de la Casa de Iván de Vargas.

Museo de Colecciones Reales

La edificación de este polémico museo, a los pies de la Catedral de la Almudena y junto al Palacio Real, ha permitido descubrir restos de primer orden para comprender el origen y la evolución de Madrid.


Estado de las obras del museo en junio de 2010. 

Sin embargo, aún no conocemos la verdadera cuantía y naturaleza de todo lo que se ha encontrado, más allá de algunos elementos de gran magnitud, como el magnífico lienzo de muralla musulmana. Y las informaciones aparecidas son tan desconcertantes, sorprendentes, contradictorias y, sobre todo, tan poco fundamentadas que no es de extrañar que andemos un poco perdidos sobre la trascendencia de los hallazgos.

Por ejemplo, el pasado 20 de febrero la prensa publicó que las excavaciones arqueológicas realizadas obligaban a retrasar el nacimiento de Madrid como ciudad al siglo XII y que, con anterioridad, sólo cabía hablar de un simple acuartelamiento militar. Y todo ello porque se habían descubierto unas viviendas, que parecían corresponder a ese siglo.

De un plumazo y sin más explicaciones (las estamos esperando), se echaban por tierra años y años de sólidas investigaciones, a cargo de acreditados historiadores, en las que se evidencia que Madrid, en el siglo IX, no sólo era una almudayna (ciudadela, de carácter militar), sino también una medina (ciudad, de carácter civil).

Y si no, ¿dónde hubiéramos metido a los afamados astrónomos Maslama al-Mayriti y su hija Fatima al-Mayriti, nacidos en el siglo X y considerados los primeros madrileños con nombre conocido? ¿O es que fueron fruto de un insólito apareamiento entre machos militares, acuartelados en la guarnición madrileña?


Restos arqueológicos bajo la explanada de la Almudena. Imagen capturada del vídeo explicativo de la arqueóloga Esther Andréu, donde ésta aduce que Madrid surgió como ciudad en época cristina y no islámica (25 de febrero de 2011).

Lo más asombroso del asunto es que, apenas nueve días antes, Emilio Tuñón, uno de los arquitectos del nuevo museo, ofreció una versión muy diferente, durante una conferencia celebrada en Pamplona, en la Universidad de Navarra.

No sólo señaló que las viviendas a las que nos acabamos de referir eran del siglo IX, sino que se hizo eco de algunos descubrimientos arqueológicos poco divulgados, como es el caso de un yacimiento carpetano (donde él situaba el verdadero origen de Madrid) y de varios enterramientos de esclavos cristianos.

Todo un cúmulo de paradojas que nos llevan a pensar mal. ¿No será que estamos ante una campaña de intoxicación informativa o, mejor dicho, desinformativa? ¿No será que nos quieren despistar sobre el destino final de los restos encontrados, que, en su mayoría y al margen de los que van a ser musealizados, terminarán nuevamente bajo tierra o, sencillamente, destruidos?

Esperemos que este mal pensamiento sólo sea una conjetura sin fundamento y que pronto nos tengamos que morder la lengua. A ver cómo se desarrollan los acontecimientos.

Puentes Segoviana y Toledana

Puestos a ser desconfiados, nos preguntamos por el paradero de las puentes Segoviana y Toledana, antecedentes medievales de los actuales puentes de Segovia y Toledo, cuyos vestigios aparecieron durante las obras de soterramiento de la M-30.

Aún recordamos cómo la Comunidad de Madrid instó al ayuntamiento para que instalara los restos de la Puente Segoviana, por ser los más completos, en uno de las jardines surgidos dentro del Proyecto Madrid Río, en un lugar próximo a su enclave primitivo.

Cuando éste está a punto de ser finalizado, al menos en sus principales fases, el rastro de la vieja estructura parece haberse perdido.

El primitivo Puente Segoviana. Detalle del dibujo de Anton van den Wyngaerde (Biblioteca Nacional de Viena).

Casa de Iván de Vargas

Terminamos con un tema que hemos abordado hace poco: la Casa de Iván de Vargas. Este edificio del siglo XVI, tradicionalmente vinculado a San Isidro, fue demolido en 2002 para ser reconstruido y habilitado como biblioteca.

Durante las obras han desaparecido valiosos elementos arquitectónicos y ornamentales, caso de la portada y de un escudo renacentista. Si esto ha ocurrido con diferentes piezas de la fachada, que eran visibles al público, ¿qué no habrá pasado con el casi desconocido interior, al que nadie podía acceder?

Quizá seamos demasiado desconfiados. Pero, visto lo visto, hemos comprobado que el respeto por el patrimonio histórico y artístico no se encuentra entre las prioridades de nuestros políticos.

La Casa de Iván de Vargas apuntalada, en una imagen histórica.

4 comentarios:

  1. La Casa se derribó de forma clandestina. De la noche a la mañana desapareció. Entonces estaba cubierta con unas lonas. La hija del alcalde Manzano se casó en la iglesia de San Miguel, frente a la casa, y se pusieron las lonas. Al cabo de un tiempo la casa había desaparecido. Dijeron que se había caído sola. ¡Qué risa! Eso se hizo en paralelo a la aniquilación de los restos de la Casa del Tesoro, en la plaza de Oriente. La arqueologa de esas obras era una tal Andreu, que ahora sale en la prensa pergeñando historias sobre el origen de Madrid, negando que naciera con los musulmanes en el siglo IX.
    ¡Cuánta falta le hacen a Madrid políticos que se preocupen por el pasado y por el futuro de la ciudad!

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  2. Muy bueno, Jesús, lo de "insólito apareamiento entre machos militares". Esperemos a ver cómo lo explican...si lo hacen.
    En contraposición, cabreo "monumental y arqueológico" por la desidia, ineptitud, irresponsabilidad y estulticia de determinados personajes de los equipos técnicos y de gobierno, que son capaces de aseverar, sin fundamento, un giro tan brutal en la historia "mundial", como es eliminar con una opinión, también sin fundamento, tres siglos de nuestro querido Madrid.
    La impotencia no es sólo un desajuste de cierto órgano masculino, es una disfunción a la que, desgraciadamente, nos han abocado estos expertos descerebrados que manejan nuestro patrimonio histórico. Y estas aseveraciones, sí tienen fundamento, sobradas pruebas de sus actuaciones tenemos.
    Reitero mi apoyo a estas inquietudes arqueológicas, pero con impotencia, escepticismo, un grito y un puñetazo en la mesa.

    Un abrazo.

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  3. Es una autentica vergüenza.

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  4. Hola a todos:
    Vuelvo a pediros perdòn por el retraso en responderos.

    Claro, Cecilia, nos dan argumentos "de risa" para justificar su tropelìas. Lo peor es que mucha, muchìsima gente se lo termina creyendo, porque los polìticos tienen unos voceros (=medios) muy bien adiestrados.

    Hola Manuel, muchas gracias, tu tono irònico y sarcàstico siempre resulta bienvenido (nos encanta), aunque, esta vez, se aprecia en tu redacciòn un cabreo "in crescendo", al que tambièn nos sumamos.

    Hola xxx. Bienvenido(a) y muchas gracias por tu contundente comentario!!

    Un abrazo muy fuerte a todos y, de nuevo, muchas gracias!!!

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