lunes, 12 de mayo de 2014

San Isidro, en Roma

Celebramos la festividad de San Isidro recuperando la sección “Madrid fuera de Madrid”, en la que seguimos la pista de aquellos personajes, objetos o tradiciones que, teniendo un origen madrileño, han encontrado arraigo fuera de nuestra ciudad.

Viajamos hasta Roma, donde localizamos dos iglesias consagradas al patrón de la capital, conocido en Italia como Sant’Isidoro Agricola o Sant’Isidoro Lavoratore. No olvidemos que el nombre Isidro, que nos suena tan castizo, es realmente una degeneración de Isidoro.



La primera de ellas es Sant'Isidoro a Capo le Case, de estilo barroco, situada muy cerca de la célebre Via Veneto. Fue fundada en 1625 por Ottaviano Vestri di Barbiana, por entonces obispo de Túsculo, tres años después de que el Papa Gregorio XV canonizase a San Isidro, junto con Santa Teresa de Jesús, San Ignacio de Loyola, San Francisco Javier y San Felipe Neri.

Además del templo, fue creado un hospicio, que en un principio fue regentado por franciscanos españoles, sustituidos posteriormente por franciscanos procedentes de Irlanda. Por esta razón la iglesia también es llamada Sant'Isidoro degli Irlandesi. 

Sus arquitectos fueron Antonio Felice Casoni (1559-1634), Domenico Castelli (1582-1657) y Carlo Bizzaccheri (1656-1721), este último autor de la fachada, que se estructura en tres secciones. La inferior está formada por un pórtico, al que se accede a través de una doble escalera en rampa, mientras que la superior queda configurada por un frontón de remate circular, donde se inscribe una leyenda alusiva al santo madrileño.

La parte central es, sin duda, la más ornamentada. Se ilumina por medio de un vano, coronado con un sinuoso frontón de volutas, a cuyos lados se sitúan dos hornacinas, una con una estatua de San Patricio y otra de San Isidro.


'Sant'Isidoro e la Vergine Maria', de Andrea Sacchi.

El templo tiene una única nave y es de cruz latina. Su elemento más valioso es la Cappella da Sylva, erigida en honor del noble portugués Rodrigo López da Sylva, obra de Lorenzo Bernini (1598-1680). En el altar mayor se encuentra el lienzo Sant'Isidoro e la Vergine Maria, de Andrea Sacchi (1599-1661), en el que se representa a San Isidro realizando su milagro más famoso, el de los ángeles tirando de los bueyes. 

Además de ésta, Roma cuenta con otra iglesia dedicada a San Isidro, en las proximidades de la Piazza della Repubblica. O mejor dicho, contaba, porque de Sant'Isidoro alle Terme, llamada así porque fue edificada en un sector de las Termas de Diocleciano, solo queda su fachada barroca.

Sant'Isidoro alle Terme. Fotografía de Wikipedia.

El Papa Benedicto XIV (1675-1758) ordenó su construcción en 1754, a partir de un proyecto del arquitecto Giovanni Pannini (1720-1810). En los años cuarenta del siglo XX se decretó su derribo, en un intento de recuperar la estructura original de las termas.

Conocemos el aspecto que tenía el altar mayor gracias a un grabado del siglo XVIII, que reproducimos a continuación. La pintura que lo presidía repetía el mismo tema del cuadro existente en Sant'Isidoro a Capo le Case, con un esquema muy parecido.


10 comentarios:

  1. Hola Jesús,
    Cuando he visto el título y ese Sylva, he tirando de hilo y, con tus datos y con ayuda del artículo de Paulo Varela Gomes "A arquitectura dos marqueses Castelo Rodrigo", he llegado a las siguientes conclusiones:
    - En 1626, Rodrigo López da Sylva, nieto de Ruy Gomes da Silva, príncipe de Éboli, financió el primer claustro del convento franciscano.
    - De 1627 a 1633, Manuel de Moura Corte Real, II marqués de Castel-Rodrigo financió el segundo claustro, obra del padre irlandés Lucas Wadding.
    -En honor del primer noble se erigió la Cappella Sylva y en honor del segundo, una placa en el refectorio (después se dedicaría a San Carlino alle quattro Fontane donde se encontró con Borromini y su secuela en Lisboa).
    Es fascinante seguir los pasos de estos personajes ¡y de sus nietos! hasta encontrar sus obras que, por suerte, han llegado hasta nosotros.
    Perdona la extensión y gracias por el magnífico artículo (y sus pistas).
    Un abrazo

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    1. Hola Antonio:
      Al final, el mundo es un pañuelo. Me alegra mucho que hayas encontrado nuevas pistas. Seguro que con tu enorme capacidad para tirar del hilo realizarás grandes descubrimientos.

      Gracias a ti por tu sagacidad. Abrazos, Jesús

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  2. Hola Jesús. Interesante entrada, con una documentación esplendida. Es curioso que en Roma, tengan también la advocación a San Isidro o Isidoro.
    Un abrazo.

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    1. Hola José:
      Si es que tenemos un patrón muy cosmopolita. San Isidro tiene una gran relevancia en Italia, en forma no solo de templos o cuadros, sino con procesiones y actos festivos varios, que resultan tan próximos como curiosos.

      Abrazos, Jesús

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  3. Un artículo precioso dedicado a nuestro San Isidro viajeros. Gracias por esta visita a la espectacular Roma.
    Abrazos
    PD: y felicidades a Antonio por esas nuevas pistas que le das para que pueda seguir descubriendo esta historia que tiene entre manos :)

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    1. Hola Mercedes:
      A ver si conseguimos que nuestro admirado Antonio nos sorprenda con nuevos descubrimientos. Si es que al final Roma, Madrid y Lisboa están más unidos de lo que parece.

      Un abrazo, Jesús

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    2. Por alusiones. No tengo nada entre manos, siento decepcionaros :( Sólo fue que al citar Jesús esta iglesia de S. Isidro sabía que detrás estaban Manuel de Moura y un descendiente del príncipe de Éboli y al repasar bibliografía ha cuadrado todo.
      Abrazos

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    3. Gracias Antonio y feliz día de San Isidro!!!

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  4. Hola Jesús,
    No me imaginaba yo que estuviera S. Isidro tan arraigado en la Ciudad Eterna. Me le hacía más local, más nuestro. Es que en cuanto te hacen santo...
    Curioso post romanomadrileño.
    Un abrazo.

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  5. Hola Manuel:
    Es lo que tiene la santidad, jeje. Y es que nuestro santo, tan castizo él, se anticipó varios siglos a la globalización.

    Feliz día de San Isidro. Abrazos, Jesús

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